Hablar de Confort ambiental implica para nuestra empresa una preocupación por la calidad de vida y el hábitat de la sociedad en su conjunto, por este motivo utilizamos equipos recicladores de gas refrigerante.
Tambien contribuimos con el reciclado del aceite contaminado de los compresores que son reemplazados, evitando el vertido del mismo al terreno. Por otra parte, todos los técnicos y operarios que integran nuestro equipo de trabajo se rigen de manera estricta por la normativa de seguridad vigente.
Con la instalación de los nuevos equipos Clase energética “A”, que cuentan con los máximos coeficientes de rendimiento gracias a la tecnología “Inverter”, se suprime los picos de arranque ya que la capacidad del compresor varía según las necesidades térmicas y además posee gas ecológico y mejoran la sensación de confort. Los diseños brindan la combinación perfecta entre elegancia y alta eficiencia.
En lo que tiene que ver con el mantenimiento de los equipos podemos decir que con el condensador y evaporador limpio, se logra mayor fluidez en el cambio de temperaturas, logrando el menor consumo de energía para generar la misma cantidad de frío/calor.
La primavera es el momento ideal para realizar, a los equipos de aire acondicionado, el mantenimiento preventivo necesario para encarar la temporada de calor. Durante su funcionamiento, los acondicionadores van disminuyendo su rendimiento debido al polvo y suciedad que se va adhiriendo en el aleteado tanto de la unidad interior como de la exterior. Esa baja de rendimiento se ve reflejada no solo en la cuenta de UTE sino también en la vida útil del equipo. Necesariamente una vez al año se debe realizar una inspección ocular del estado de limpieza de evaporador, condensador y bandeja de desagüe, así como controlar el consumo, la carga de gas y realizar limpieza y ajuste de los contactos eléctricos para evitar un mal funcionamiento o la rotura cuando más lo necesite.
Informe de “El Observador” sobre los costos de los equipos de Aire Acondicionado.
Calefaccionar un ambiente sale entre $370 y $1.548 por mes. El acondicionador de aire es la opción más económica y la estufa eléctrica la más cara. El Split cuesta $1,60 por cada 1.000 kcal y su consumo mensual, si se enciende seis horas al día, sólo llega a $370.
El uso de energía eléctrica para calefacción muestra además un aspecto paradójico al brindar la más barata y la más cara de las opciones a la hora de calefaccionar un ambiente, dependiendo de la eficiencia del artefacto utilizado. El estudio de la consultora SEG Ingeniería, al que accedió El Observador, asevera que la estufa eléctrica es la más costosa –y la menos recomendable– de todas las alternativas. Esos electrodomésticos, que pueden ser estufas a cuarzo, caloventiladores o convectores, tienen un costo de $ 6,67 por cada 1.000 kilocalorías (kcal) con una tarifa residencial simple ($ 6,08 el año pasado). Si se mantiene prendido un panel eléctrico de 1.500 vatios durante seis horas diarias, 30 días al mes, para calefaccionar un ambiente de unos 30 metros cuadrados la factura de UTE se sobrecargará en $ 1.548, de acuerdo al estudio. Para el análisis comparativo se consideró un consumo de energía de 270 kilovatio/hora por mes, que equivale a 232.173 kcal y que es igual al gasto de energía de los paneles eléctricos.
Por contrapartida, los splits son las estrellas del momento. Tanto en verano como en invierno. Es el instrumento más eficaz y más barato para soportar el frío invernal. Su costo es de $ 1,60 por cada 1.000 kcal ($ 1,58 en 2012) y su consumo mensual, si se enciende seis horas al día, solo llega a $ 370. Los acondicionadores de aire salen hoy entre US$ 350 y US$ 400 de media, en su versión para un ambiente de 30 m2.
“En un invierno y medio se recupera la inversión”, dijo a El Observador, Ernesto Elenter, gerente de SEG Ingeniería. La energía eléctrica es “tan eficiente” que con el aire acondicionado “termina siendo mucho más conveniente” pese a ofrecer también la más cara de las opciones. Los splits presentan un rendimiento de 280%, porque toman aire del exterior, factor clave para su eficacia, añadió el experto. Los paneles eléctricos, en cambio, irradian en calor la misma cantidad de energía que utilizan.
Los aires acondicionados bajaron “mucho” de precio en los últimos años. “Hay dos tipos”, prosiguió Elenter, los “equipos estándares y los equipos de alta eficiencia, que pueden gastar hasta 40% menos que los estándares y valen entre US$ 600 y US$ 700”. Afirmó que los splits tienen una vida de siete a ocho años.
Los filtros de aire, el evaporador y el condensador deben estar limpios para que el rendimiento no se vea afectado. Los contactos eléctricos deben estar sin oxido y perfectamente ajustados para evitar recalentamiento de los cables. La cañería en toda su extensión debe estar sin manchas de aceite (que demuestran fuga de refrigerante) y con su aislación en perfecto estado para no tener perdida de frio o calor. La carga de gas (que debe ser ajustada al instalarse pero raramente es realizada como corresponde) debe ser la justa, ni más ni menos. Todo lo anterior, de no hacerse correctamente y de forma profesional, lleva a aumentar el consumo y disminuir el rendimiento y la vida útil de su aparato.
Los fabricantes de equipos de aire acondicionado han volcado al mercado multitudes diferentes de controles remotos. Sin embargo, el manejo de los mismos es bastante sencillo. Vamos a considerar cuales son las tres funciones básicas para lograr la temperatura deseada, luego de encender el equipo.
(START/STOP ó I/O) Presione este botón para encender la unidad.
Cada vez que presiona este botón, se selecciona un modo. Puede moverse entre las palabras AUTO (Automático), COOL (refrigeración), DRY (deshumidificación), HEAT (calefacción) y FAN (ventilación).
Presione este botón para disminuir o aumentar la temperatura interior.
Cada vez que presione este botón se selecciona una velocidad de la turbina interior, pasando por LOW (baja), MED (media), HIGH (alta) y AUTO (automática).
En la temporada de calor una temperatura en el rango de los 23 grados Celsius es la más recomendable y cómoda para una habitación, ya que el cuerpo humano es capaz de adaptarse a estas condiciones climáticas y en esta temporada se suelen vestir prendas más ligeras.
Una temperatura demasiado baja causada por un aparato de aire acondicionado es una frecuente causa de resfriados, molestias de garganta o dolores de cabeza, sobre todo si el aparato se deja conectado durante la noche.
Además una temperatura demasiado baja sube innecesariamente la factura de energía. Por cada grado Celsius de más que se enfría una casa, el aparato de aire acondicionado gasta aproximadamente un 8% más de energía.